Bienvenidos Al batiscafo sonoro.
Una tarde más aquí en Imagono, nos vamos de viaje por las ondas, agradecer primero la gran aceptación que tuvo el programa piloto con el que conseguimos sumergirnos en un mar de ideas, en un mar de sensaciones que no hubiesen sido posibles sin tu imaginacion, por que al fin y al cabo no hay imagen, es tu imaginación. Hoy no nos vamos a mojar, hoy vamos a volar, hoy surcaremos cielos que nos contarán distintas historias, de aquí, al infinito, ya sin más dilación, abróchense los cinturones que Despegamos, esto es: El Batiscafo Sonoro.
Cuentas las horas, los minutos hasta los segundos, quieres sentir ese cosquilleo que va creciendo del ombligo a tu frente haciendo escala por la espalda. Escuchar la campana que anuncia el despegue, contar hasta diez al revés, cerrar los ojos y volar, volar alto tan alto que tu cuerpo no puede llegar, ahora eres solo mente, alma y pensamiento, disfruta que las nubes vuelven a ser de algodón.
Se hace el silencio, el viento acaricia tu pelo, se cuela por tu ropa y se pierde por tus dedos, esa sensación de frescura no la has tenido antes, estas flotando, en un mar azul, un mar sin agua, es el cielo, tus mejores recuerdos son los que ahora fluyen, los que cantan, dibujan sonrisas y no quieres hacer otra cosa que escuchar, esta canción.
Cuando somos pequeños no tenemos ninguna preocupación, todo es fácil, comemos, lloramos, comemos y dormimos. Esto es lo que diría un adulto que ha perdido toda gota de niñez, cuando uno es pequeño tiene mil y una preocupación, desde saber porqué mamá huele tan bien, o simplemente por que tenemos un doble atrapado en un espejo. Seamos Inocentes.
Una mentira es una bala que se cuela en tu cuerpo y no llega a ser mortal, es venenosa, poco a poco te va consumiendo, dicen que por cada mentira tenemos que inventarnos otras siete para aguantarla, ese circulo vicioso convertiría nuestra vida en una mentira entera, y ese peso, es el que te va ha hacer estrellarte contra la cruda realidad.
Nunca te ha pasado, que imaginas un momento, sonríes, y sigues haciendo lo que hacías? Ese es el concepto del viaje, un periodo de tiempo en el que no dejamos de sonreír y nos dejamos llevar por estas palabras y esta cadena de acordes, No dejes de hacer lo que haces, el tiempo es algo egoista, algo que siempre nos falta o nos sobra, el tiempo es el peor invento del hombre, más que las armas, ya que sin este, no tendríamos tiempo de pelearnos.
Estamos subiendo muy alto, rozando casi el sol, notas como sus caricias cálidas tuestan tus mejillas, dejas de lado todo la malo, solo quieres acercarte un poco más, llegar un poco más lejos, no quieres que este viaje acabe nunca, no puedes abandonar el Batiscafo, no quieres apagar la radio, ves que se acaba, empiezas a caer, poco a poco, rápido a rápido, en picado.
Algo ha frenado tu caida en seco, ahora sigues volando, pero no cerca del suelo, cerca del mar, notas como el mediterraneo te salpica, su aroma, su musica, su color. Gaviotas te acompañan, peces que se camuflan entre la espuma del mar, reflejos que bailan al ritmo de tu musica, un submarino aparcado, ballenas y sirenas, no puedes hacer nada más que maravillarte ante tal espectaculo, habíamos prometido no mojarnos en este viaje, pero decides zambullirte, bucear hasta lo más profundo, fundirte en sus aguas, abrir bien los ojos para poder observar el baile de las medusas, el precioso brillo en las escamas de sus peces, embriagarte de las esencias más basicas jugando con su arena, haciendo remolinos que mecen sus algas, no quieres salir, al fin y al cabo es: El Mediterraneo.
La Playlist:
Nocturne No. 21 in C minor- Jean Alexis Smith
No surprises- Radiohead
Peaches & Cream- John Butler Trio
Mandolines Tralarí- El Petit de Cal Eril
Lies- Glen Hansard
Jimmy- Moriarty
Hard Sun- Eddie Vedder
Entre Dos Aguas- Paco de Lucia
Final Feliç- Joan Miquel Oliver.
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